Hotel verde

Un vaquero descubre un cráneo en el Valle de Juárez, y luego una espina dorsal. Los forenses piden rascar más en la tierra porque un omóplato no coincide con el otro. Y es entonces que empiezan a salir restos, más restos, muchos restos: tantos como para decir que, por los al menos 21 esqueletos encontrados hasta hoy, se trata del mayor cementerio clandestino de mujeres en la historia de Ciudad Juárez o, posiblemente, de todo México.

El Hotel Verde, ubicado en las calles Mariano Samaniego, esquina con Ignacio Altamirano, en el centro de ciudad Juárez, México. Es el lugar donde jóvenes desaparecidas en los años 2008 al 2010, fueron retenidas por una banda de trata de personas, pertenecientes al cártel de los Aztecas.

Las jóvenes entre 13 y 22 años de edad, fueron capturadas en calles del centro de la ciudad, en paradas de autobús, y en otros casos por medio de supuestas entrevistas de trabajo, donde los dueños de locales eran parte del grupo criminal.

Las mujeres eran llevadas al Hotel Verde, donde permanecían drogadas contra su voluntad, obligadas a ejercer la prostitución y venta de drogas. Meses después de su secuestro fueron asesinadas en el Arroyo del Navajo, en el valle de Juárez, donde se encontraron restos de veintiséis mujeres, de enero del 2012 hasta la fecha. Todas habían desaparecido en el centro de la ciudad y presentaban la misma causa de muerte.

La investigación por el secuestro, y asesinato de estas jóvenes, inició en el 2012; gracias a la declaración de una sobreviviente de 16 años, que logró escapar del hotel Verde, ayudada por un cliente del lugar. El juicio para once de los veintiséis casos se llevó a cabo en junio del 2015. Seis miembros del grupo criminal:   Manuel Vital Anguiano, César Félix Romero Esparza, José Gerardo Puentes Alva, Jesús Hernández Martínez y José Antonio Contreras Terrazas y Edgar Jesús Regalado Villa; recibieron sentencia de 695 años de cárcel.

Las declaraciones en el juicio, reconstruyeron los últimos días de vida de estas mujeres en el hotel verde y su trágica muerte.

Alrededor de 155 personas testificaron en el juicio, quienes denunciaron haber visto a las jóvenes con vida, en los alrededores del hotel verde y en otras partes del centro, sin embargo, al acudir a las autoridades no obtuvieron ninguna respuesta.

Se denunció que la banda criminal colaboraba con la policía municipal y estatal para la movilización y prostitución de las jóvenes en casas particulares y los reclusorios de Chihuahua y ciudad Juárez.